Saber y sentir cuando algo es verdadero es muy bonito, pero darte cuenta de lo que pasa a tu alrededor resulta un tanto cansador y por sobre todo denigrante.
Me siento mal, tonto y usado. Mientras que otro en mi posición, quizás, estaría saltando de la emoción.
Hoy fue nuestra primera salida "normal"; sólo los dos, sin alcohol y sin ambiente que me diera paso al distraerme en cosas sin importancia, todo me daba paso a sólo enfocarme a él. Sentí cierto grado de amor, sentí comodidad, cierto grado de cercanía, pero al mismo tiempo sentí conformismo, alejamiento, desgano y tal vez un simple deseo sexual.
Me di cuenta de que me quiere, de eso no me cabe duda, pero para mi desgracia, no de la misma forma que yo lo hago. Claramente él para mi significa un "todo", algo con lo que me obsesiono, algo con lo que no dejo descansar a mi cabeza, él es el protagonista de mis pensamientos, no encuentro una descripción correcta, que logre acaparar todo lo que es para mi. Mientras que yo para él, significo otro más, el clavo con el que intenta sacar al otro. Me lo dijeron sus ojos, su leve incomodidad, sus lapsus de desinterés, sus caricias perdidas, su desgano y por sobre todo, sus ganas de querer, su intento, su autoimposición, que me resultó tan obvia, y que me destruyó en segundos. De una forma más fácil; me tiene a mi, porque no tiene a nadie más, no puede tener al que él realmente quiere y se conforma con estar conmigo. Me resumo a un simple conformismo. Palabras que llegaron tan rápido y de manera tan definitiva, que me llegan a resultar verdaderas.
Me reflejé en él, sí, me divisé a mi mismo, la misma forma con la que yo me sentía al estar con mis antigüas parejas, la misma forma que yo me comportaba y quería intentar ser con ellas, él lo hizo hoy conmigo.
Karma y realidad de un solo choque, el destino es sabio y claramente en un abrir y cerrar de ojos me hizo ver todo lo que yo estuve haciendo por mucho tiempo, con personas que realmente no se lo merecían. Sabía que estaba mal, muy mal, pero hoy lo interiorizo, lo siento de manera real, y pucha que lastima. De la misma forma en la que hoy me vi envuelto, me pongo a pensar, ¿ellos se habrán sentido de ésta forma?, ¿ellos habrán sufrido de la misma forma que estoy sufriendo yo?, ¿por qué no me di cuenta de lo mierda que estaba siendo?, ¿por qué no me di el tiempo de ponerme en el lugar de los demás? ¿por qué no intenté ser alguien mejor?.
Estuve con buenas personas, pero mi vil realidad de aquél entonces es que, estuve con ellas porque me hacían resaltar, porque me querían de verdad y lo demostraban, porque me tenían como su todo, como yo egolátramente siempre he querido. La cruda verdad es que siempre me conformé con las personas que estuve, quizás no llenaban mis espectativas, quizás no eran lo que yo buscaba al amar, pero una parte mía muy egoísta, los quería, los quería para mi, no importaba nada más que mis propósitos de no estar en soledad. Los quería para tener a alguien, una figura que me hiciera sentir que no estoy solo, y claramente ese fue mi error. Me aproveché de su amor, me aproveché de sus ansias de amar y ser amados, me aproveché de su oportunidad de encontrar verdaderamente el amor, de encontrar una persona que valiera la pena. En pocas palabras los utilizé de una forma autoritaria y didactorial, los manipulé, y claramente no fue lo correcto. Me doy cuenta de lo que fuí, hoy, mucho tiempo después y de una forma avismante, chocante, pero por sobre todo dura y triste.
¿QUÉ PASARÁ?
Seguiré el jueguito de Francisco, en una de esas realmente se decide por mi, quizás pueda convertirme algún día en su todo, en todo lo que sueño en convertirme para él, en significar alguna vez en su vida, tanto como él le está significando a la mía. Porque mi verdad es que lo quiero mucho, caigo en el demasiado, quizás lo logre amar como a nadie, porque lo quiero de verdad, y aunque me duela y esté pagando con conformismo, una parte de mi es muy feliz al estar con él, al poder acariciar su piel, al poder besar sus labios, al escuchar sus "te quiero", al leer todas las falsas verdades que me dice y al ocupar minutos de su vida.
Me encerraré en ser su conformismo y me tragaré todo el dolor que conlleva.